Súbete al asiento del conductor de un poderoso superdeportivo y dirígete al punto más alto del centro de Barcelona. El camino hacia la cima, a 512 metros, está lleno de giros y curvas que lo convierten en una experiencia de conducción extremadamente divertida y exigente. Una vez que en la cumbre, quedarás deleitado por las mejores vistas de la ciudad que se extienden hasta el Mediterráneo.

Allí arriba también podrás ver la emblemática Iglesia del Sagrado Corazón de estilo neogótico y el parque de atracciones Tibidabo, una atracción imprescindible. En el camino de vuelta, acelera y siente el poder del superdeportivo y su potencia de frenado en las rectas rectas de la arbolada carretera Arrabasada.

Es el city tour por excelencia, ofrece un viaje placentero y lleno de adrenalina en las carreteras más espectaculares de Barcelona.